Por momentos me siento ajeno a esta ciudad, tan contaminada,
que temo perderme en ella, buscando mi libertad en medio de tanta rebeldía,
todo se torna familiar pero igual es tan normal que veo rostros que vienen y van, por momentos disipo tu mirada en
la lejanía haciendo diferencia de los demás, ahí en ese justo momentos estas
tú… es como si en este mismísimo momento estuvieras y no, porque si lo estas
somos dos aparte, si estas no te siento, aunque me señales con tus ojos,
enredándome con tus suspiros, caricias, intentando caer tu y yo en el juego de
preguntar lo esperado y apropiado del momento, sin que nadie espere respuesta
alguna pues ya tu y yo somos cómplices de este inicio, en el fondo apareciste
de la nada sin ser esperada, y aunque supe que estaba pasando algo me rehúse a
creerlo, rozándonos en la polución del momento me miraste de tal manera que me
sentí como un intruso golpeando en la puerta sellada, no supe como descifrar
tan extraño gesto, y fue ahí, en ese lugar, sin descubrir, donde tu y yo
iniciamos el momento sin saber si sí o si no, será? Sin conocerte también lo
pensaste, pero algo te impulso y es eso lo que hoy por hoy aun nos mantiene a
ti y a mi, sabes? Por momentos se me ocurre pensar de la nada, que un día te
quiera mas de lo que he dicho hasta el momento y otro me gustes tanto, que una
mañana futura me de por temblar al verte ahí a mi lado, como un par de
ancianos, acercándome lentamente a tu rostro y contemplar tus ojos, y no sepa
que decir… y otra tarde tú, con tu acostumbra improvisación te apoyes sobre mi
hombro tan tiernamente, tal como solo tu lo sabes hacer, y me llenes aun mas de
tanto amor, que no sepa como expresar de nuevo ese momento tan indescriptivo,
momento inigualable, solo saber que solo tú con tu presencia y energía
acogedora, me tome y no me separe para cumplir un sueño que tuve de niño,
encontrar la mujer ideal, la mujer esperada la que solo yo como hombre esperaba
pacientemente hasta hallarla, saber que el sol y la luna son parte de esta
historia, que espero sigan ahí, acompañando el día a día de este sentimiento
que crece como flor en el ocaso, tu ya entenderás que todo tiene su proceso;
cuando te busco ahí estas en el mismo lugar que te encontré con tu disposición
de donde nunca espero verte ir, tan vivo, tan cercano que por momentos, la
inocencia se apodera de mi y me dan ganas de abrazarte y de sentirte.
Jc...
